Tuesday, November 21, 2006

El Islam y Occidente - Inspiración italiana

Me leí el libro de Oriana Fallaci, la controversial periodista italiana que murió de cáncer hace unos meses, que se llama "The Rage and the Pride" (lo recomiendo). Este corto libro, es la versión ampliada del artículo que escribió después del 11 de septiembre, es su respuesta a los actos terroristas, pero más que eso es un llamado de atención a Occidente, a todos nosotros, para que abramos los ojos ante algo que ella nos venía diciendo desde hace más de 20 años...

El libro me encantó y estoy de acuerdo con mucho (casi todo) lo que ella expone. Básicamente ella explica cómo los musulmanes fanáticos quieren acabar con Occidente a como dé lugar, tan simple como eso. Nos recuerda que Ousama Bin Laden dijo que el planeta entero debía convertirse al Islam. Explica cómo nuestra respuesta militar no ha ayudado a disuadir la ofensiva terrorista islámica, sino que al contrario, la ha estimulado. Ella defiende nuestra cultura, explica con ejemplos muy válidos lo avanzados que somos (en temas de las ideas, ciencia y tecnología, leyes, justicia, vida en sociedad, arte etc) cosa que no puede negarse. Nos compara con los pueblos musulmanes que todavía se cortan los brazos como penalidad por un robo, entre otras barbaridades que a nuestros ojos nos parecen tan difíciles de asimilar.

Pero esto me pone a pensar mucho y llama mucho mi atención el hecho de que en el fondo el problema es que ni nosotros los soportamos a ellos, ni ellos a nosotros. Y que siempre la solución ha sido buscar sobreponer una cultura sobre otra, imponer una religión sobre otra... cosa que nos ha llevado a eternas y sangrientas guerras... a qué costo y con qué éxito?

Entonces mi pregunta es por qué tenemos que imponer una cultura sobre la otra? Nosotros no somos musulmanes, no crecimos en esa cultura, no podemos imponerles la cultura de occidente. A nuestro juicio, tiene más sentido nuestra cultura occidental porque hay más evolución, más justicia, buenos principios y valores, y nosotros consideramos que la cultura musulmana es retrógrada y que va en detrimento de los derechos humanos, especialmente los de la mujer, donde ella se ve relegada y en muchos casos no tiene ni derecho a la educación. Consideramos que el Koran coarta la libertad de los hombres, les impide beber una copa de vino, permite la poligamia, impone el matrimonio arreglado (cosa que muchos jóvenes aún siendo abiertos y receptivos de la cultura occidental deben aceptar y seguir por requerimiento y/o por hacer felices a sus familias). A las mujeres las degrada, las hace usar la burkha haciéndoles perder su belleza ocultando su silueta... Pero no por ello podemos ir a los países musulmanes a imponer una democracia y menos A LA FUERZA.

Por más avances que hayamos alcanzado, no deberíamos considerarnos superiores. Pero tampoco ellos. Y esta es la ira que Fallaci expresa en su libro, dice que es obvio que ellos quieren acabar con nosotros y que quieren imponernos su cultura, con lo que está en total y absoluto desacuerdo. Y yo también. Cuenta cómo Yasser Arafat (ser al cual aborreció con todo su corazón, alma, piel y espíritu) le decía que su cultura era "superior" a la nuestra porque inventó las matemáticas, teoría que ella desmiente.

Pero entonces ella también debería estar en desacuerdo con que nosotros queramos imponerles nuestra cultura por más convencidos que estemos con que "es mejor". Ojalá pudiéramos llegar a un punto de cohabitación... las religiones existen y seguirán existiendo... no fuimos capaces de seguir los consejos de Gandhi hace 100 años cuando decía que todas las religiones convergen a un mismo punto... y tampoco lo vamos a hacer ahora. Cada religión tiene sus creencias es una cuestión de fe. La fe no se le puede quitar a una cultura y es algo con lo que la gente crece, que viene de raíces demasiado fuertes y de a cual es casi imposible desligar a alguien, mucho menos a todo un pueblo.

Por qué nos es tan difícil convivir en el mismo mundo? Cada uno tiene derecho a opinar. Y por ejemplo yo opino (al igual que Oriana Fallaci) que la cultura musulmana –en especial la extremista y fanática- irrespeta muchos Derechos Humanos, la justicia, impide el desarrollo del hombre como ser educado y libre. Puedo pensarlo, expresarlo, ponerlo en un papel y gritarlo si quiero. Pero no puedo intentar imponer lo que pienso. No puedo atropellar el proceso de maduración de una cultura y obligarla a que lo haga a la misma velocidad que la mía. Jamás voy a lograr que se respeten los derechos humanos en una nación si llego a ella irrespetándolos para implantar lo que yo pienso que es "la manera correcta de vivir". Maquiavelo pues... no importan los medios que se utilicen si el fin es bueno. No!! Pues sí importan, porque ese es además el ejemplo. Si se hacen las cosas a las malas, no creo que se pueda tener ningún resultado positivo.

Yo entiendo que hay barbaridades que ocurren día a día en el mundo musulmán y que deberíamos impedirlas mientras estemos vivos. Estoy totalmente de acuerdo con Fallaci cuando dice que luchar sólo por “nuestra” libertad es un insulto a la justicia y cuando declara que la tragedia de las mujeres musulmanas nos concierne a cada uno, a todos. Fallaci cuestiona una realidad: a la gente le importa un bledo lo que le pase a diario a nuestras hermanas musulmanas porque las considera inferiores... y en este caso “quién es el racista?”, el que las considera inferiores o el que las critica a ellas por dejarse abusar de esa manera y a su cultura por violadora de la libertad? Pero cómo sería la mejor forma de evitar la injusticia social en el pueblo islámico?

En fin... creo que nadie deja de creer de un día para otro lo que ha aprendido y practicado durante toda su vida. Que tampoco nadie tiene derecho a quitarle al otro sus raíces. Tiene que haber una mejor manera de arreglar las disputas religiosas e incomprensiones culturales de este mundo... siendo pacientes, respetando, educando... pero no con odio, ni matando.